Bioplastia facial

La Voluminización facial (también llamada Bioplastia facial)  es un nuevo concepto de rejuvenecimiento del rostro. Los últimos estudios en estética facial han demostrado que, con la edad, se produce una pérdida y descolgamiento de los paquetes grasos de la cara, lo cual produce un aspecto cansado y con flacidez. Este proceso es el que conduce a un acentuamiento de las arrugas de marioneta, de los surcos nasogenianos, y una pérdida de definición del contorno mandibular, tal como podemos ver en la siguiente foto:

La Voluminización facial es un tratamiento médico sin cirugía basado en la aplicación subcutánea de materiales de relleno a base de ácido hialurónico para rejuvenecer, corregir la forma y volumen de las estructuras faciales y prevenir el envejecimiento. Ya no se trata de poner esos rellenos tan antiestéticos y poco naturales que tanto se han visto hace algunos años, sino de reposicionar esos volúmenes perdidos con pequeñas cantidades de hialurónico, para conseguir redefinir nuestros contornos faciales y devolvernos un rostro más relajado y fresco.

 

¿En qué consiste la técnica?

Primero se realiza un análisis detallado para identificar las zonas susceptibles de ser tratadas, basándonos en un conocimiento profundo de la anatomía facial y de las particularidades de cada paciente. Una vez identificadas las áreas a tratar, se procede a reposicionar los compartimentos perdidos y descolgados con pequeñas cantidades de ácido hialurónico. De esta forma conseguimos revitalizar la piel y redefinir los contornos consiguiendo un aspecto más descansado y, en definitiva, más joven. Además, con esta técnica no sólo mejoramos los signos de envejecimiento actuales, sino que también retrasamos y prevenimos el descolgamiento progresivo de las estructuras faciales que se produce con el paso de los años.

Procedimiento Es una técnica no dolorosa para el paciente y por tanto en la gran mayoría de los casos no requiere de anestesia local. Inicialmente se limpia y prepara la piel para posteriormente proceder al infiltrado del Ac. Hialurónico con una aguja muy fina o con microcanulas, para evitar así mayores efectos secundarios tales como inflamación y/o hematomas. La duración del tratamiento suele ser de 30-45 minutos. Tras el tratamiento, el paciente puede retomar sus actividades profesionales y sociales al día siguiente y en caso de algún pequeño hematoma se puede corregir con maquillaje sin problema. La duración del resultado suele ser entre 12-15 meses, aunque esto dependerá en parte de las particularidades de cada paciente.

 

¿Con qué técnicas de rejuvenecimiento se puede complementar?

Dado que es una técnica que produce resultados muy naturales, es ideal para complementar a otros tratamientos mas específicos como la toxina botulínica (para corregir pequeñas arrugas de expresión) o con técnicas inductoras de colágeno como el Radiesse o el novedoso láser fraccionado 1540 nm, que también ofrecemos en nuestra clínica.